El objetivo de este trabajo es abordar las posibilidades de articulación entre la experiencia de la discapacidad y la cuestión denominada por el sistema bio-psico-médico de salud mental, a partir de una perspectiva antropológica. El foco de análisis son las políticas públicas del área y un análisis de narrativas de personas diagnosticadas con algún tipo de “trastorno” de orden mental o psicológica. El abordaje se centra en las cuestiones de construcción de la persona, del cuerpo y de la subjetividad, en el sentido de comprender cómo estas categorías se articulan, por un lado, con procesos de patologización de la discapacidad y de la locura y, por otro, con la manifestación de la llamada “discapacidad psicosocial” como identidad política.