Se engañan los que creen que las investigaciones en las ciencias sociales son inocuas. Muchas veces sus impactos, directos o indirectos, en políticas públicas y en ideologías en general tienen un enorme alcance. Por eso, ir más al fondo del debate sobre la ética en la investigación en ciencias sociales es cada vez más necesario. En el campo de la antropología, él ha sido llevado en Brasil, hace algunos años, en especial por iniciativas de la Asociación Brasileña de Antropología (ABA). Pero, dada la naturaleza cambiante de las cuestiones sociales, políticas, culturales y económicas, es necesario estar constantemente retomando los términos del debate para perfeccionarlo, difundirlo y contribuir a la incorporación práctica de sus resultados por parte de los investigadores y de las instituciones. Producto de un seminario realizado en la Universidad de Brasilia, este libro constituye una excelente contribución en esta dirección y una lectura necesaria para todos aquellos que tienen consciencia de la necesidad de la ética en la investigación.